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Ansiedad

 

 

Anxiety es un término general para varios trastornos que causan nerviosismo, miedo, aprensión y preocupación.

Estos trastornos afectan cómo nos sentimos y nos comportamos y pueden causar síntomas físicos. La ansiedad leve es vaga e inquietante, mientras que la ansiedad severa puede afectar seriamente la vida cotidiana.

 

 

¿Qué es la ansiedad?

¿Estás ansioso?

 

Tal vez te sientas preocupado por un problema en el trabajo con tu jefe.

 

Tal vez tengas mariposas en el estómago mientras esperas los resultados de un examen médico.

 

Tal vez te pongas nervioso cuando conduces a casa en la hora pico cuando los autos pasan a toda velocidad y cambian de carril.

 

En la vida, todos experimentan ansiedad de vez en cuando. Esto incluye tanto a adultos como a niños. Para la mayoría de las personas, los sentimientos de ansiedad van y vienen y duran poco tiempo. Algunos momentos de ansiedad son más breves que otros, y duran desde unos pocos minutos hasta unos pocos días.

 

Pero para algunas personas, estos sentimientos de ansiedad son más que preocupaciones pasajeras o un día estresante en el trabajo. Es posible que su ansiedad no desaparezca durante muchas semanas, meses o años. Puede empeorar con el tiempo, a veces volviéndose tan grave que interfiere con su vida diaria.

 

Cuando esto sucede, se dice que tienes un   trastorno de ansiedad .

 

 

¿Cuáles son los síntomas de la ansiedad ?

 

Si bien los síntomas de ansiedad varían de persona a persona, en general el cuerpo reacciona de una manera muy específica a la ansiedad. Cuando te sientes ansioso, tu cuerpo se pone en alerta máxima, buscando posibles peligros y activando tus respuestas de lucha o huida. Como resultado, algunos síntomas comunes de ansiedad incluyen:

  • nerviosismo, inquietud o estar tenso

  • sentimientos de peligro, pánico o pavor

  • aumento o sudoración intensa

  • debilidad y letargo

  • dificultad para concentrarse o pensar con claridad en otra cosa que no sea lo que le preocupa

  • un fuerte deseo de evitar las cosas que desencadenan su ansiedad

  • realizando ciertos comportamientos una y otra vez

 

Ataques de pánico

 

Un   ataque de pánico  es una aparición repentina de miedo o angustia que alcanza su punto máximo en minutos e implica experimentar al menos cuatro de los siguientes síntomas:

  • palpitaciones

  • transpiración

  • sacudiendo o temblando

  • sentimiento  dificultad para respirar  o asfixia

  • sensación de asfixia

  • dolores en el pecho  or opresión

  • náuseas o problemas gastrointestinales

  • mareos , aturdimiento o sensación de desmayo

  • sensación de calor o frío

  • sensación de entumecimiento u hormigueo ( parestesia )

  • sentirse separado de uno mismo o de la realidad, conocido como despersonalización y desrealización

  • miedo a “volverse loco” o perder el control

  • miedo a morir

 

 

Hay algunos síntomas de ansiedad que pueden ocurrir en condiciones distintas a los trastornos de ansiedad. Este suele ser el caso de los ataques de pánico. Los síntomas de los ataques de pánico son similares a los de las enfermedades cardíacas , los problemas de tiroides , los trastornos respiratorios y otras enfermedades.

 

Como resultado, las personas con   trastorno de pánico   pueden hacer viajes frecuentes a salas de emergencia o consultorios médicos. Pueden creer que están experimentando condiciones de salud que amenazan la vida además de la ansiedad.

 

La ansiedad es una reacción humana natural a situaciones estresantes, pero se convierte en una condición cuando ocurre con frecuencia sin un desencadenante.

Es importante saber la diferencia entre los sentimientos normales de ansiedad y un trastorno de ansiedad que requiere atención médica.

Cuando nos enfrentamos a desencadenantes potencialmente dañinos o preocupantes, los sentimientos de ansiedad no solo son normales sino necesarios para la supervivencia.

Desde los earliest días de la humanidad, el acercamiento de los depredadores y el peligro entrante ha encendido las alarmas en el cuerpo y ha permitido que un individuo tome medidas evasivas. Estas alarmas se vuelven perceptibles en forma de latidos cardíacos acelerados, sudoración y mayor sensibilidad al entorno.

Una descarga de adrenalina en respuesta al peligro provoca estas reacciones. Este impulso de adrenalina se conoce como la respuesta de "lucha o huida". Prepara a los humanos para confrontar físicamente o huir de cualquier amenaza a la seguridad.

Para la mayoría de las personas modernas, huir de animales más grandes y de un peligro inminente es una preocupación menos apremiante. Las ansiedades ahora giran en torno al trabajo, el dinero, la vida familiar, la salud y otros temas cruciales que exigen la atención de una persona sin que necesariamente requieran la reacción de 'lucha o huida'.

Ese sentimiento nervioso antes de un evento importante en la vida o durante una situación difícil es un eco natural de la reacción original de 'lucha o huida'. Todavía puede ser esencial para la supervivencia: la ansiedad de ser atropellado por un automóvil al cruzar la calle, por ejemplo, significa que una persona instintivamente mirará a ambos lados para evitar el peligro.

 

trastorno de ansiedad

La duración o la gravedad de un sentimiento de ansiedad a veces puede ser desproporcionada con respecto al desencadenante o factor estresante original. Los síntomas físicos, como el aumento de la presión arterial y las náuseas, también pueden hacerse evidentes. Estas respuestas van más allá de la ansiedad hacia un trastorno de ansiedad.

Los trastornos de ansiedad ocurren cuando una reacción es desproporcionada con respecto a lo que normalmente se esperaría en una situación. pensamientos o preocupaciones”.

 

Tipos

          _cc781905-5cde-3194-bbbad3b5cf58d_ siete tipos de trastornos principales clasificados en ansiedad. Éstos incluyen:

  • Trastorno de ansiedad generalizada (GAD, por sus siglas en inglés) : este es un trastorno crónico que involucra ansiedad y preocupaciones excesivas y duraderas sobre eventos, objetos y situaciones de la vida no específicos. Es el trastorno de ansiedad más común. Las personas con TAG no siempre pueden identificar la causa de su ansiedad.

  • Trastorno de pánico:  Los ataques breves o repentinos de terror intenso y aprensión caracterizan el trastorno de pánico. Estos ataques pueden provocar temblores, confusión, mareos, náuseas y dificultad para respirar. Los ataques de pánico tienden a ocurrir y aumentan rápidamente y alcanzan su punto máximo después de 10 minutos. Sin embargo, pueden durar horas.   Los trastornos de pánico generalmente ocurren después de experiencias aterradoras o estrés prolongado, pero también pueden ocurrir sin un desencadenante. Una persona que experimenta un ataque de pánico puede malinterpretarlo como una enfermedad potencialmente mortal. Los ataques de pánico también pueden provocar cambios drásticos en el comportamiento para evitar futuros ataques.​

  • Fobia:  Este es un miedo irracional y evitación de un objeto o situación. Las fobias se diferencian de otros trastornos de ansiedad en que se relacionan con una causa específica. El miedo puede reconocerse como irracional o innecesario, pero la persona sigue siendo incapaz de controlar la ansiedad. Los desencadenantes de una fobia pueden ser tan variados como situaciones, animales u objetos cotidianos.

  • Trastorno de ansiedad social:  Este es un miedo a ser juzgado negativamente por otros en situaciones sociales o miedo a la vergüenza pública. Esto incluye una variedad de sentimientos, como el miedo escénico, el miedo a la intimidad y el miedo a la humillación. Este trastorno puede hacer que las personas eviten las situaciones públicas y el contacto humano hasta el punto de que la vida cotidiana se vuelve extremadamente difícil.

  • Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC):  This es un trastorno de ansiedad caracterizado por pensamientos o acciones que son repetitivas, angustiosas e intrusivas. Los que padecen TOC suelen saber que sus compulsiones son irrazonables o irracionales, pero les sirven para paliar su ansiedad. Las personas con TOC pueden limpiarse obsesivamente las manos o los artículos personales o revisar constantemente las cerraduras, las estufas o los interruptores de luz.

  • Trastorno de estrés postraumático (TEPT):  Esta es la ansiedad que resulta de un trauma previo, como un combate militar, una agresión sexual, una toma de rehenes o un accidente grave. El PTSD a menudo conduce a escenas retrospectivas y la persona puede hacer cambios de comportamiento para evitar los desencadenantes.

  • Trastorno de ansiedad por separación:  Se caracteriza por altos niveles de ansiedad cuando se separa de una persona o lugar que le brinda sentimientos de seguridad o protección. La separación a veces resulta en síntomas de pánico. Se considera un trastorno cuando la respuesta es excesiva o inadecuada tras la separación.

Cuándo ver a un médico

No siempre es fácil saber cuándo la ansiedad es un problema médico grave y cuándo un mal día te hace sentir molesto o preocupado. Sin tratamiento, es posible que su ansiedad no desaparezca y empeore con el tiempo. Tratar la ansiedad y otras afecciones de salud mental es más fácil desde el principio que cuando los síntomas empeoran.

 

Debe visitar a su médico si:

  • Sientes que te preocupas tanto que interfiere con tu vida diaria (incluida la higiene, la escuela o el trabajo y tu vida social)

  • su ansiedad, miedo o preocupación le angustia y le cuesta controlarla

  • se siente deprimido, está usando alcohol o drogas para sobrellevar la situación, o tiene otros problemas de salud mental además de la ansiedad

  • tiene la sensación de que su ansiedad es causada por un problema de salud mental subyacente

  • está experimentando pensamientos suicidas o está realizando comportamientos suicidas (si es así, busque asistencia médica inmediata llamando al 911)

 

Tratamientos de ansiedad en casa

Si bien tomar medicamentos y hablar con un terapeuta puede ayudar a tratar la ansiedad, lidiar con la ansiedad es una tarea de 24 horas al día, 7 días a la semana. Afortunadamente, hay muchos cambios simples en el estilo de vida que puede hacer en casa para ayudar a aliviar aún más su ansiedad.

Hacer ejercicio.   Establecer una rutina de ejercicios para seguir la mayoría o todos los días de la semana puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad. Si normalmente es sedentario, comience con solo unas pocas actividades y continúe agregando más con el tiempo.

Evite el alcohol y las drogas recreativas . Consumir alcohol o drogas puede causar o aumentar su ansiedad. Si tiene problemas para dejar de fumar, consulte a su médico o busque ayuda en un grupo de apoyo.

Deje de fumar y reduzca o deje de consumir bebidas con cafeína.  La nicotina en los cigarrillos y las bebidas con cafeína como el café, el té y las bebidas energéticas pueden empeorar la ansiedad.

Pruebe técnicas de relajación y manejo del estrés . Hacer meditación, repetir un mantra, practicar técnicas de visualización y hacer yoga pueden promover la relajación y reducir la ansiedad.

Duerma lo suficiente.  La falta de sueño puede aumentar la sensación de inquietud y ansiedad. Si tiene problemas para dormir, consulte a su médico para obtener ayuda.

Siga una dieta saludable.  Coma muchas frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras, como pollo y pescado.

 

 

Afrontamiento y apoyo

Lidiar con un trastorno de ansiedad puede ser un desafío. Aquí hay algunas cosas que puede hacer para que sea más fácil:

  • Sea informado.  Aprenda todo lo que pueda sobre su afección y qué tratamientos están disponibles para que pueda tomar las decisiones adecuadas sobre su tratamiento.

  • Se consistente.  Siga el plan de tratamiento que le dé su proveedor de salud mental, tome sus medicamentos según las indicaciones y asista a todas sus citas de terapia. Esto ayudará a mantener alejados los síntomas del trastorno de ansiedad.

  • Conócete a ti mismo.  Averigüe qué desencadena su ansiedad y practique las estrategias de afrontamiento que creó con su proveedor de atención médica mental para que pueda manejar mejor su ansiedad cuando se desencadena.

  • Anótelo.  Llevar un diario de sus sentimientos y experiencias puede ayudar a su proveedor de atención médica mental a determinar el plan de tratamiento más adecuado para usted.

  • Obtener apoyo.  Considere unirse a un grupo de apoyo donde pueda compartir sus experiencias y escuchar a otras personas que lidian con trastornos de ansiedad. Asociaciones como la Alianza Nacional sobre Enfermedades Mentales o la Asociación Estadounidense de Ansiedad y Depresión pueden ayudarlo a encontrar un grupo de apoyo apropiado cerca de usted.

  • Administra tu tiempo inteligentemente.  Esto puede ayudar a reducir su ansiedad y ayudarlo a aprovechar al máximo su tratamiento.

  • Se social.  Aislarse de sus amigos y familiares puede empeorar su ansiedad. Haz planes con las personas con las que te gusta pasar el tiempo.

  • Agita las cosas. No dejes que la ansiedad tome el control de tu vida. Si se siente abrumado, divida su día dando un paseo o haciendo algo que distraiga su mente de sus preocupaciones o miedos.

 

Póngase en contacto con grupos de apoyo

Los grupos de apoyo pueden brindarle consejos sobre cómo manejar su ansiedad. También son una buena manera de conocer a otras personas con experiencias similares.

Ejemplos de grupos de apoyo que puede encontrar útiles incluyen:

Los grupos de apoyo a menudo pueden organizar reuniones cara a cara, donde puede hablar sobre sus dificultades y problemas con otras personas. Muchos grupos de apoyo también brindan apoyo y orientación por teléfono o por escrito.

 

 

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